Las cápsulas de isotretinoína son un medicamento utilizado principalmente en el tratamiento del acné severo y resistente a otros tratamientos. La isotretinoína es un retinoide que actúa reduciendo la producción de sebo en la piel, disminuyendo la inflamación y evitando la obstrucción de los poros, lo que ayuda a mejorar la apariencia de la piel y prevenir la formación de nuevos brotes de acné. Además del tratamiento del acné, la isotretinoína también puede utilizarse en otras afecciones dermatológicas como la rosácea o la queratosis folicular. Su uso debe ser supervisado por un dermatólogo y seguir al pie de la letra las indicaciones y pautas de tratamiento